Cuando vamos la playa, muchas veces nos encontramos en la arena unas “pelotas peludas” de diferentes tamaños. No son kiwis, ni las bolas de escarabajo pelotero… ¿Sabes qué son?
Son pelotas de posidonia y los pelitos que vemos son restos de las fibras procedentes de su tallo que al ser mecidas por el oleaje van tomado esa forma de esfera que las caracteriza.
Su presencia en las playas nos da pistas de que tenemos un auténtico tesoro sumergido.